Hoy traigo mi versión de otra popular receta de la dieta mediterránea. Soy consciente que el conejo nos es bocado de gusto para todo el mundo, si me lo permitís diré para todos aquellos que no os gusta que lo intentéis porque merece la pena, estoy segura de que no es por su sabor ya que es muy suave y normalmente tiene más que ver con historias del folklore popular que por su sabor, pero lo que es seguro es que es una de las carnes más senas de una dieta.
En casa nos encanta y quizas no lo cocine tanto como quisiera porque la verdad es que cunde poco pero además da mucho juego para preparar con unas buenas salsas, lo uso por supuesto en la paella en la que no puede faltar. Tambien lo preparo con una salsa de tomate picante y en una receta a la que llamo Cazuela Campera, entre otras.
Esta es una carne blanca, tierna y jugosa si lo sabes cocinar y entre sus propiedades hay que destacar su alto valor nutritivo y que se se digiere con facilidad.
El animalito es cierto que provoca cierta controversia por diferentes motivos, ya que su descontrolada reproducción arruina las cosechas y su escasez desequilibra el ecosistema.
Una receta muy conocida por todos, es fácil y sabrosa "al ajillo", pocos ingredientes y mucho sabor.
- 1 conejo
- 1 cabeza de Ajos
- 2 patatas
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen
- unas ramitas de tomillo o romero al gusto
- sal
- pimienta
- 2 cucharadas de vinagre
- 1/2 vaso de vino blanco
Elaboración
Vamos a empezar por las patatas, sé que no es normal empezar por la guarnición pero como yo he preparado las patatas al horno, lo ideal es empezar por aquí precalentado el horno a 200º. Vosotros podéis hacer las patatas fritas de siempre o como más os gusten pero yo prefiero hacerlas al horno para ahorrarnos un poco de grasa y ya que el conejo es una carne sana, para que añadirle calorías, además el torradito de las patatas al horno os va a encantar.
Vamos a empezar por las patatas, sé que no es normal empezar por la guarnición pero como yo he preparado las patatas al horno, lo ideal es empezar por aquí precalentado el horno a 200º. Vosotros podéis hacer las patatas fritas de siempre o como más os gusten pero yo prefiero hacerlas al horno para ahorrarnos un poco de grasa y ya que el conejo es una carne sana, para que añadirle calorías, además el torradito de las patatas al horno os va a encantar.
Pelar las patatas y cortarlas en lascas un poco más grandes que si fueran para tortilla, las ponemos en una fuente de horno con unos 5 o 6 ajos con camisa cortados por la mitad, salpimentamos y ponemos un poco de aceite y las metemos al horno precalentado a 200º unos 20 minutos.
Ahora ya vamos con el conejo. Salpimentamos los trozos, ponemos a calentar una cazuela con un poco de aceite y cuando esté caliente agregamos los dientes de ajo con camisa aplastados, les damos una vuelta y añadimos el conejo troceado, controlamos el fuego, al principio alegre pero sin pasarse y no movemos la carne hasta que se despegue sola del fondo sin tener que hacer fuerza para ello, le damos la vuelta y dejamos dorar el otro lado.
Agregamos el vinagre y vino y dejamos que evapore el alcohol, añadimos las hierbas aromáticas, bajamos el fuego al mínimo y medio tapamos la cazuela y cocinamos hasta que se haya evaporado todo el vino. Destapamos y le damos un minuto de fuego fuerte, tiene que quedar bien doradito por fuera.
Terminados los dos procesos sacamos las patatas del horno, añadimos el conejo y la salsa a la fuente donde habéis cocinado las patatas y lo metéis al horno unos 3 o 4 minutos más para que se mezclen todos los sabores.
Ahora vamos a disfrutar de un conejo al ajillo de lo más natural y económico.
Espero que disfrutéis de la receta.
Ahora vamos a disfrutar de un conejo al ajillo de lo más natural y económico.
Espero que disfrutéis de la receta.
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